miércoles, 10 de junio de 2015

Viajes alternativos



Viajamos mucho aquellos días.  Por territorios empantanados de nuestra memoria. Por carreteras sinuosas que tarde o temprano nos devolvían al punto de partida. Viajamos para escapar de nosotros mismos, a través de  palabras escritas, sin movernos del mismo sitio. Unas veces como turistas acelerados, sin ver ni sentir; otras como trotamundos que se enamoran de cada paisaje, de cada historia, de las gentes sencillas que habitaban aquellos lugares. Con la añoranza del regreso y  de escapar, a la vez, por la ventana de esa vida vacía que trataba de engullirnos.

                                                                          ©Loli Pérez
Imagen: Polanoid.net