Eterna belleza
Me dirijo al Museo de Arqueología para ver la momia
de una hermosa reina egipcia, que según las últimas investigaciones, murió en extrañas
circunstancias.
Solo faltan diez minutos para el cierre y para mi sorpresa, el guarda me permite el paso, se
inclina, y murmura algo que no puedo entender.
Todo está en silencio, rápidamente busco el
sarcófago. Lo veo al fondo en una sala envuelto en la penumbra. Está cerrado, al
acercarme un terrible presentimiento se apodera de mí, pero lo desecho de mi
mente. Con las manos pegajosas de sudor apenas sin respiración, abro la tapa. El
grito que sale de mi interior, se convierte en un gemido agónico, cuando emerge
de mis labios.
Desde el ataúd y envuelta en vendas la veo a ella,
viste mis ropas, y se dirige hacia el exterior, mientras el guarda, haciendo
una reverencia, le susurra:
─Bienvenida mi reina.
─Bienvenida mi reina.
©Trini
Carrera Sedeño
Muy Bueno!
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